A pesar de las consecuencias que ha traído la pandemia del coronavirus y el confinamiento, han habido 3 beneficiarios involuntarios:
Reducción de la contaminación
Varios investigadores de IQAir, una compañía global de tecnología e información sobre la calidad del aire, realizaron un estudio en 10 grandes ciudades del mundo, que tienen un número relativamente alto de casos de covid-19 y que implementaron medidas de cuarentena. Los expertos encontraron, por ejemplo, que, en Nueva Delhi, considerada una de las capitales más contaminadas del planeta, ha habido una reducción de partículas mortales durante un período de 3 semanas de cuarentena, respecto a la misma época del año anterior. Y según el centro de investigación sobre energía y aire limpio, las emisiones de dióxido de carbono en China disminuyeron, al menos en 25% del 3 de febrero al 1 de marzo, debido a las medidas para contener el coronavirus, provocando que actualmente tengamos cielos más azules.
La tierra tiembla menos
Los sismólogos están observando mucho menos ruido sísmico ambiental, es decir, las vibraciones generadas por automóviles, trenes, autobuses y personas en su vida cotidiana Explican que con la ausencia de ese ruido, la corteza superior de la tierra se mueve un poco menos.
La vida silvestre
Ante la ausencia de seres humanos, en Adelaide en el sur de Australia se han visto en las últimas semanas varios canguros saltando tranquilamente por las calles. Venados recorren los desolados vecindarios en París mientras que, en Nueva Delhi, India se observan monos jugando tranquilamente en las aceras.
Lo importante de estos acontecimientos y esta nueva oportunidad que el planeta tierra nos está dando, es mantenerla y cuidarla para las futuras generaciones.